Toyota Yaris Cross 120H Style: un SUV híbrido y polivalente

El Toyota Yaris Cross está basado en el Yaris normal y tienen la misma plataforma, los mismos sistemas híbridos de impulsión y un montón de componentes mecánicos y electrónicos. El Yaris Cross es un SUV del tamaño de los utilitarios polivalentes, con 4,18 metros de longitud. Con respecto al Yaris convencional, el Yaris Cross tiene exactamente la misma distancia entre ejes. La distancia que va del centro de la rueda delantera al centro de la rueda trasera es la misma. Pero es 24 centímetros más largo y esa longitud extra se consigue en los voladizos. La distancia que hay de la rueda al extremo trasero y de la rueda al extremo delantero. El Yaris Cross tiene una imagen más robusta, con protecciones en pasos de rueda y laterales, aunque su mayor altura le hace menos aerodinámico. Su mayor tamaño permite al Yaris Cross contar con un maletero de casi 400 litros. En caso de necesitar más capacidad de carga se pueden abatir los respaldos traseros, que están divididos en tres mitades 40:20:40. Tiene el piso dispuesto en dos alturas. Bajo el piso inferior no se cuenta con rueda de repuesto, tanto solo hay un kit para reparar pinchazos. Hay cuatro niveles de acabado. El Style de la unidad probada es el más alto de los tres que son tracción delantera o 4×2 y solo en el superior, denominado Adventure, se cuenta con un sistema de tracción integral o 4×4, que Toyota denomina AWD-i. El Style es un tracción delantera y, aunque es un SUV, tampoco tiene unas grandes posibilidades para moverse fuera del asfalto. Para andar por caminos en mal estado y zonas no muy complicadas tenemos una altura libre al suelo de 17 cm, que siempre es una ayuda. El motor de gasolina es un pequeño motor de tres cilindros en línea, con 1,5 litros de cilindrada y proporciona una potencia máxima de 92 CV. En las versiones de tracción delantera, el motor de gasolina está acoplado a un motor eléctrico de 80 CV de potencia máxima, que está alimentado por una batería de iones de litio de 0,76 kWh de capacidad. El sistema de impulsión híbrido no enchufable cuenta con una potencia máxima combinada de 116 caballos y recibe la etiqueta ECO de la DGT. No hay caja de cambios como tal, sino que un sistema de engranajes planetarios se encarga de trasladar la fuerza de impulsión de los motores a las ruedas. Es automático y además de la posición D convencional tiene una B en la que la retención por parte del motor eléctrico es algo mayor y también la recuperación de energía en los descensos. El peso se queda ligeramente por debajo de las 1,2 toneladas y acelerar de 0 a 100 km/h le cuesta algo más de 11 segundos, una cifra bastante modesta para la potencia teórica. Puede alcanzar los 170 km/h de velocidad máxima. El consumo medio oficial que da Toyota es de 4,9 litros/100 km y se puede lograr en trayectos urbanos y semiurbanos, donde las frenadas y deceleraciones permiten recargar la pequeña batería del sistema híbrido. En trayectos de autovía el consumo supera con facilidad los 7 litros/100 km. En nuestra prueba, con algo más de 1.000 km recorridos y bastante autovía, el consumo medio ha sido de 6,2 litros/100 km. El espacio para los pasajeros es razonable para el tamaño del vehículo. Las plazas delanteras cumplen bien y ofrecen una buena visibilidad, con los asientos regulables en altura y calefactables. El acceso a las plazas traseras no es cómodo. El ángulo de apertura de las puertas no es grande y el hueco que dejan es pequeño y de forma irregular. Además, el umbral forma un escalón con el piso del coche. La salida es peor, ya que en esta operación el umbral con escalón molesta más. En estas plazas traseras hay un espacio razonable para que dos adultos viajen cómodamente, aunque si la plaza central está ocupada ya irán justitos y el que ocupe esa plaza central no estará cómodo. Las ventanillas traseras bajan del todo, aunque no hay salidas orientables de aire del climatizador. Se echa en falta una luz de cortesía para estas plazas. El diseño del salpicadero es muy similar al del Yaris convencional. No es tan vistoso, como algunos de sus rivales más directos. En ese sentido tiene un diseño algo más sobrio, pero está todo donde tiene que estar y los materiales parecen de calidad. En la consola central hay un hueco portaobjetos con sistema de carga inalámbrico para móviles y una toma USB convencional. El sistema multimedia es de fácil manejo y mejora claramente a los anteriores. La pantalla está en una posición elevada, lo que favorece su visibilidad. Incluye el sistema de navegación con actualización on-line de los mapas y la compatibilidad con Apple Car Play o Android Auto sin cable, algo muy práctico. El Yaris Cross es un coche fácil de conducir y en el que uno se siente cómodo desde el primer momento. Hay tres modos de conducción, el normal, el ECO y el PWR o modo potencia. Suscríbete a La 7 motor tv 👉 https://cutt.ly/CjuNeYq

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